Es una modalidad de marketing que consiste en la realización de diferentes acciones publicitarias que tienen lugar en el espacio público, con el objetivo de llamar la atención de las personas que acuden a ese lugar.
Mediante estrategias de comunicación propias del street marketing las empresas tienen la posibilidad de atraer la atención de gran número de personas procedentes del mundo real, es decir, no procedentes de la Red sino de sitios públicos.
Lo cual marca la diferencia ante otro tipo de campañas es que frecuentemente los individuos lo interpretan como una vivencia y no como publicidad.
En la actualidad los usuarios buscan algo más que sencillamente sentirse atraído por una marca. Lo cual en realidad anhelan es vivir una vivencia con la marca, sentirse parte de ella.
Características.
Una de las propiedades primordiales de esta clase de tácticas de mercadeo callejero es que suponen inversiones más bajas a las existentes en otros medios como él en línea o el de los medios de comunicación clásicos.
Una campaña de street marketing bien desarrollada podría ser capaz de atraer enorme proporción de público con inversiones bajas.
Otros de los aspectos a resaltar en el desarrollo de ocupaciones de mercadeo callejero son la votación de puntos de vista o ubicaciones que posibiliten la atención a causa de los individuos, la construcción de rumores que atraigan el foco de atención anteriormente o la utilización de un lenguaje más cercano y sencillo para poder hacer cercanía con la población.
Por cierto, el street marketing consigue acercarse al consumidor invadiendo su espacio y ganándose su simpatía y su atención.
Objetivos.
Finalmente, es notable el parecido que tiene con el marketing de guerrilla referente a propiedades de originalidad y cercanía con el público. Sin embargo, la diferencia elemental entre las dos herramientas de comunicación es el canal, debido a que como se ha indicado antes el mercadeo callejero se hace en un ámbito offline mientras tanto que el de guerrilla puede tener sitio en ámbitos en línea.